8 de septiembre de 2010

CAMISETAS QUE SON AMORES II- Edición Europa

ESPAÑA

En la Madre Patria no fueron tan sonados los que se pasaron del Atlético de Madrid ("el aleti") al Real Madrid o al revés. Seguramente el caso más recordado sea el de Hugo Sánchez (Mexicano él) que fue ídolo en todo Madrid y uno de los artilleros más prolíficos del fútbol ibérico. 
Hugo arrancó en Atlético de Madrid, en 1981, pero a fuerza de goles (fue Pichichi o sea, el jugador/ goleador máximo de la liga) y de hecho, se agenció el título de la  la Copa del Rey. Gracias a los servicios servidos al colchonero; los merengues le pusieron el ojo, lo tentaron, se lo llevaron al Real Madrid y no se equivocaron. Con el Real, Sánchez fue Campeón de Liga en las temporadas 1985-86, 1986-87, 1987-88, 1988-89 y 1989-90, Campeón Copa del Rey 1988-89 y Campeón Supercopa de España 1989. En total marcó 162 goles y se llevó 4 premios Pichichi, igualando al argentino Alfredo Di Stéfano y al español Quini. Un inolvidable total del fútbol español.

ITALIA
En Italia la rivalidad pasa, básicamente, por el asunto geográfico Norte-Sur. Eso para empezar -y que se extiende ampliamente fuera del calcio... pero ese es otro asunto- Una vez instalados en una región determinada, tenemos dos clásicos salvajes: la Roma vs la Lazio, clásicos de la capital italiana, y luego, el clásico de los clásicos, clásico feroz, digamos que es el de los dos equipos que representan el norte (norte rico, norte pujante, norte arrogante) son Milan e Inter. De los futbolistas que vistieron ambas camisetas, el caso más emblemático es el de Ronaldo, quien tras jugar cinco temporadas en el Inter, en 2006 fue a Milan tras su paso por el Real Madrid.
Otro de los casos es el holandés Clarence Seedorf (un símbolo del Milan, aunque antes se había puesto la camiseta nerazzurra, entre los años 2000 y 2002).
Más traidores: Ídolo en Parma y Lazio, el argentino Hernán Crespo se dio también el gusto de actuar para Inter y Milan, convirtiendo goles importantes en ambos clubes; Christian Vieri, temible goleador italiano, llegó al Inter en 1999 a cambio de 40 millones de euros, para después pasar al Milan en 2005 ; Andrea Pirlo llega al Milan en 2001 y es aún hoy uno de los símbolos del equipo y la última, la del sueco Slatan Ibrahimovic, flamante incorporación del Milan, llegó al Calcio para jugar primero en Juventus, en tanto que en 2006 se convirtió en jugador del Inter tras el descenso de la Vecchia Signora.
 

1 comentario:

Anónimo dijo...

La ambivalencia afectiva tambien entra al futbol. Todos tenemos recuerdos de habernos querido cambiar de equipo... hasta que llega la censura de los adultos.

Rodrigo Tovar